Hace unos meses me encontré con ese llamado de la poderosa "Abuelita".En todo mi recorrido había pensado que yo como clarividente o persona muy intuitiva no necesitaba de la medicina ancestral para encontrar respuestas, ni mucho menos ver o acceder a realidades diferentes a las que se encuentran en el mundo no visible.
Sin embargo en un retiro a Ohio, me encontré con un grupo que había tomado la determinación de beber la planta sagrada llamada coloquialmente Ayahuasca. Fue todo tan rápido, que de la noche a la mañana ya estaba envuelta en ir al lugar donde la iban a ofrecer.
Yo más bien creí que iba por curiosidad más que por ir a sanar alguna situación en mi vida y de repente me vi en el dilema de hacerlo por curiosidad o darle lo sagrado al evento; no tardé mucho en entender que no era algo ni de juego, y mucho menos de curiosidad, así que me puse seria, y emprendí el camino.
Al llegar al lugar estaba una Chamana que amorosamente nos colocó en un grupo, apagó todas las luces y nos empezó a hablar de lo que era la abuelita, o científicamente llamada la raíz de ayahuasca, nos explicó que habían muchos tipos de tomas, y que esta sería una suavecita que te llevaría a un viaje tranquilo y armonioso.
Antes de iniciar la toma pasamos por una primera ceremonia que era la del Rapé, una molienda de tabaco que al entrar por la nariz te ayuda a despejar la mente y enfocarte con claridad en lo que va a empezar acontecer. Todo a media luz, inicia la toma, te acercas levantas tu vasito con el líquido espeso de la pócima de la Abuelita y al tomarlo declaras “Por la Vida”, me regresé a mi lugar, e inicié el camino hacia mi yo interior.
Los primeros minutos nada pasa, solo sientes mareos propios de la bebida un poco amarga y espesa, pero conforme van pasando los minutos tu cuerpo entra en un estado de relajación profunda, lo que permite que la mente y la consciencia se hagan una para brindarte la información que en ese momento estás destinado a vivir.
Poco tiempo después una necesidad de escupir, de sacar algo que no entiendes que, porque vienes de un riguroso ayuno donde tu cuerpo se debate entre tirar desechos alimenticios o energéticos. Y así, con tu bote en la mano, quien literalmente te dice un chamán, "cuidalo que será tu mayor aliado", y de esa manera transcurre el tiempo hasta que una voz suave y dulce menciona, “esta abierta la ventana”.
Ahí es donde eliges si pasas por más, o te quedas solo en relajación, pues yo me anime a seguir y más tarde en tomarla, cuando mi mente viajo a otras vidas, entre remolinos de emociones, imágenes perdidas sin comprensión todo agolpado en la mente creativa de cad individuo.
Haciendo paréntesis de todo esto, cada persona vive y experimenta la vida diferente, ya que esto depende del nivel de consciencia de cada quien. Yo termine viendo y hablando con seres extraterrestres y angélicos a la vez.
Si hoy me preguntan cual fue mi aprendizaje en toda esta sagrada experiencia, yo diría que ese dia supe lo que se sentía tener conciencia, una sensación de ver desde arriba de manera literal la vida, como si desde una nube viera mi cuerpo como se movía y reaccionaba y a su vez como esta conciencia se enfoca en mi tercer ojo, tal cual proyector en pantalla y me mostraba toda la experiencia vivida.
¿Tu la has experimentado? Cuéntame en los comentarios
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